lunes, 25 de octubre de 2010

Enemigos íntimos


Hoy es uno de esos días que marca un hito en tu carrera profesional, y eso que estamos todavía a lunes. La semana promete mucho.
Llevo semanas preparando una reunión y, a diferencia de lo que debería ser, no estoy desarrollando el contenido del proyecto sino cómo convencer a los asistentes de lo necesario de ese proyecto. Un proyecto que considero bueno, necesario y puede que incluso rentable y en el que sin embargo, me voy a encontrar con la más absoluta oposición.

No sé porqué me extraño, la labor de los compradores suele estar mal valorada en general y cuenta con grandes enemigos dentro de la propia empresa. 

Charlando con un gran amigo y gurú de las compras me decía "Para que podamos comprar, debemos habernos creado enemigos". ¿Hasta qué punto es esto necesario? ¿Es imposible poder comprar sin tener oposición de nadie? Entiendo que a nadie le agrada que le quiten el control funciones de su trabajo pero,  ¿Qué ocurre con la predisposición al cambio, no se aplica?

"La introducción de las compras debe ser progresiva y hay que evitar enfrentamientos innecesarios" ¿Y si una continua negativa impide desarrollar tu trabajo, qué hacemos? ¿Y si te obligan a que te enfrentes?

Repito, la semana promete mucho. ¿Qué os parece a vosotros? ¿Cómo venderías un proyecto si sabes que vas a tener a la mayoría en contra?

Saludos.

- Rubén Díez Aguilar -

jueves, 21 de octubre de 2010

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